• Antonio del Campo y María González explican los factores y variables que inciden en la conservación de los ecosistemas forestales y los resultados positivos que tiene la gestión forestal ecohidrológica como estrategia de adaptación al cambio climático

“La falta de gestión y el impacto del cambio climático es el caldo de cultivo perfecto para la proliferación de los incendios forestales y aunque hay menos incendios en España, los efectos son más devastadores. Hace 25 años se quemaba una media aproximada de 5,1 hectáreas por incendio mientras que ahora es de 8,2 hectáreas, lo que significa un aumento del 60%”.

De esta forma se expresan los investigadores del IIAMA-UPV (Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente de la Universitat Politècnica de València), Antonio del Campo y María González, en el vídeo realizado por el diario “El País” y “Facebook Watch” sobre el trabajo que se está desarrollando en el proyecto LIFE RESILIENT FORESTS y donde se aborda, la importancia de llevar a cabo una gestión forestal activa y de base ecohidrológica en los bosques mediterráneos.

“La no gestión como modelo lleva demasiado tiempo vigente y no es una solución sostenible”

“La no gestión como modelo lleva demasiado tiempo vigente y no es una solución sostenible, más aún si cabe con los impactos y amenazas potenciales del cambio climático como estamos comprobando con los incendios acaecidos en los últimos meses en California (EEUU) o Australia. Es imprescindible mejorar la resiliencia de nuestros bosques a los impactos del cambio climático, promoviendo nuevas formas de gestión más sostenibles y atractivas para los usuarios”, afirman los coordinadores del proyecto LIFE RESILIENT FORESTS.

En el vídeo, que tiene una duración de 4 minutos y medio, se explican los factores y variables que inciden en la conservación de los ecosistemas forestales y los resultados positivos que tiene sobre dichas masas realizar gestión forestal. Además se recoge el caso del Ajuntament de Serra -socio participante en el proyecto- que aprovecha los residuos del bosque para transformarlos en pellets, que se emplean posteriormente como combustible.

“Realizar gestión forestal reduce el riesgo de incendio en un 27%, por lo que consecuentemente disminuye un 27% el área de propagación”

“En los diferentes estudios hemos observado que realizar gestión forestal reduce el riesgo de incendio en un 27%, por lo que consecuentemente disminuye un 27% el área de propagación, un 27% la superficie quemada, otro 27% el área de actuación en la extinción y por último otro 27% la zona de restauración posterior del incendio”, aseguran los investigadores del IIAMA.

En el proyecto LIFE RESILIENT FORESTS – que comenzó en octubre de 2018 y cuenta con una duración de 4 años- participan investigadores de Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente de la Universitat Politècnica de València (IIAMA-UPV), junto al Ayuntamiento de Serra (València), la Associação para o Desenvolvimento da Aerodinâmica Industrial (ADAI) de Portugal, el Institute of Energy and Climate Research (IEK) de Alemania y la European Biomass Industry Association (EUBIA) de Bélgica.

Puedes ver el vídeo aquí.