Pablo estudió el Grado en Ingeniería Civil en la Universitat Politècnica de València (UPV) y posteriormente amplió su formación con el Máster en Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos (ICCP) de la propia UPV. Actualmente se encuentra trabajando en Reino Unido en la ingeniería RPS Group Europe, colaborando en el desarrollo de modelos de drenaje urbano.
Pregunta: ¿Por qué decides cursar el grado de Ingeniería Civil?
Respuesta: Siempre se me han dado bien las asignaturas de ciencias, por lo que tras finalizar la selectividad tenía claro que quería cursar estudios de ingeniería. La ingeniería civil me atrajo especialmente por la diversidad y la escala de los proyectos en los que es posible estar involucrado; pero también por el carácter social que tiene, pues creo es fundamental en el desarrollo y mejora del bienestar de un país. Tras finalizar el Grado, quise especializarme en temas relacionados con el agua y el medioambiente. Por tanto, decidí continuar con el Máster ya que permitía profundizar en estos temas y era la titulación habilitante para ICCP.
P.- En líneas generales, ¿explícanos en qué consiste el proyecto “Caracterización del régimen de descargas en el sistema unitario del colector norte de Valencia”?
Cuando me propusieron el tema de mi estudio no dudé un momento y acepté, pues pensé que con mi trabajo podría ayudar en la mejora de la ciudad en la que he crecido
R.- El estudio viene motivado por la necesidad de determinar la frecuencia y magnitud de las Descargas del Sistema Unitario (DSU) de la red de colectores de la ciudad. Era necesario establecer qué puntos de vertido son los más conflictivos, y el grado de cumplimento de la normativa medioambiental, para de este modo implantar medidas correctoras.
Los vertidos a analizar proceden de una gran cuenca que recoge las escorrentías de prácticamente media ciudad de Valencia. Por lo tanto, se debió desarrollar un modelo integral de la red, incluyendo la red principal y secundaria de colectores, así como elementos de regulación como compuertas, presas hinchables o estaciones de bombeo, con sus reglas de operación. El modelo considera la variabilidad espacial de la precipitación y se calibró y validó en tiempo de lluvia, obteniendo unos ajustes muy buenos en los eventos de calibración y validación. Adicionalmente, se llevó a cabo una calibración en tiempo seco para considerar los aportes de aguas residuales en tiempo de lluvia.
P.- ¿Cuáles son sus principales líneas de investigación?
R.- El estudio lo he llevado a cabo en el grupo de Hidráulica e Hidrología del IIAMA. Una de sus líneas de investigación es el análisis y modelación de sistemas de drenaje y saneamiento. En el marco de esta línea de investigación el grupo lleva trabajando casi 40 años en el análisis de las problemáticas del sistema de colectores de la ciudad, diagnosticando problemas y proponiendo la planificación del sistema. Como parte de estos trabajos, se ha llevado a cabo la creación de un modelo matemático ajustado a eventos de series históricas para caracterizar DSU y que ofrezca resultados coherentes en eventos sintéticos para el diseño de elementos de la red colectores.
Pablo Cabo presentando su estudio en el acto de entrega de los Premios IIAMA
La adopción de medidas encaminadas a regular los volúmenes de escorrentía generados, como por ejemplo los tanques de tormenta, mejoraría notablemente la situación actual en uno de los principales puntos de vertido
P.- ¿Cómo surge la idea de llevar a cabo este trabajo?
R.- Desde un principio estaba interesado en realizar un trabajo que tratara fundamentalmente aspectos de hidráulica e hidrología urbana, por lo que contacté con mi profesor Ignacio Andrés para plantear un Trabajo de Fin de Máster. Ignacio me puso en contacto con Juan Bautista Marco y juntos me hablaron de un proyecto que tenían para elaborar un modelo de la red de colectores de Valencia. No dudé un momento y acepté, pues pensé que con mi trabajo podría ayudar en la mejora de la ciudad en la que he crecido.
P.- Tras el estudio, ¿qué conclusiones has obtenido?
R.- Las conclusiones más relevantes son que las frecuencias de vertido en la mayoría de puntos del sistema se encuentran en niveles tolerables. Sin embargo, la adopción de medidas encaminadas a regular los volúmenes de escorrentía generados (como por ejemplo, los tanques de tormenta) mejoraría notablemente la situación actual en uno de los principales puntos de vertido de la red. Por otro lado, la optimización de la actuación de los elementos de regulación también ayudaría a mejorar la situación actual. Como futuras líneas de investigación, podría estudiarse la adición de un modelo de calidad de aguas para evaluar las cargas contaminantes vertidas.
Con el sistema desarrollado, ahora se dispone de un modelo integral de la red calibrado y validado que permitirá analizar el efecto de cualquier medida que se quiera plantear
P.- ¿Cuál es el impacto social de tu proyecto?
R.- Adicionalmente a los aspectos medioambientales ya comentados, cabe decir que los puntos de vertido del sistema analizado se localizan en el tramo final del antiguo cauce del Río Turia, en la lámina de agua justo tras el Pont Assut de l’Or. Ésta es una zona de alto valor para la ciudad, que, en tiempo de lluvia, queda afectada por las descargas que el sistema unitario provoca en el entorno de los puntos de vertido. Por tanto, la mejora de la amenidad en esta zona pasa por estudiar estos vertidos
Sin embargo, uno de los principales resultados es quizás que ahora se dispone de un modelo integral de la red calibrado y validado. Una vez se tiene confianza en un modelo, se dispone de una herramienta con la que es posible analizar el efecto de cualquier medida que se quiera plantear, como la introducción de un tanque de tormentas, la mejora de la operación de los elementos de regulación, la introducción de sistemas urbanos de drenaje sostenible en un sector de la ciudad,… O el efecto que eventos futuros puedan tener, como el cambio climático o desarrollos urbanísticos. Por tanto, facilitará bastante el trabajo en futuros estudios que busquen reducir la problemática de la red de Valencia.
Pablo Cabo con su Accésit «Agua y Ciudad»
P.- Tu proyecto desarrolla un modelo numérico que introduce la variabilidad espacial de la precipitación. En este sentido, ¿cuál crees será el impacto del cambio global en las ciudades ya que diferentes estudios vaticinan lluvias con menor frecuencia, pero mayor intensidad?
Debe pensarse que acondicionar todo un sistema de colectores con medidas estructurales tradicionales puede ser inabordable, económica o técnicamente
R.- Un cambio en el régimen de precipitaciones puede provocar que infraestructuras que actualmente operan correctamente, en un futuro vean su capacidad excedida más frecuentemente. Las redes de drenaje urbano no son una excepción y por ejemplo zonas donde no era común inundaciones, podrían elevar su riesgo a ser inundadas.
En cuencas altamente impermeabilizadas, como las de un entorno urbano, la mayoría de la precipitación se transforma en escorrentía que debe recoger la red de colectores. Lluvias de mayor intensidad hacen que la red deba evacuar en un corto periodo de tiempo gran cantidad de agua. La capacidad de la red puede verse superada y entonces aparece inundación en superficie. Naturalmente, también podría alterarse las descargas de los sistema unitarios y por tanto la contaminación vertida al medio.
P.- Bajo tu punto de vista, ¿qué medidas se deben articular en las ciudades para adaptarse al cambio global?
R.- Sin dejar de lado medidas estructurales clásicas como tanques de tormenta cuando la magnitud de la problemática lo requiera, creo que donde sea posible debería apostarse por sistemas urbanos de drenaje sostenible: pavimentos permeables, pozos de infiltración, sistemas de biorretención,… Pues introducen una mayor laminación de los caudales de escorrentía en el origen de la cuenca, y complementariamente permiten cierto tratamiento de la calidad del agua y añaden riqueza visual a una ciudad. Debe pensarse que acondicionar todo un sistema de colectores con medidas estructurales tradicionales puede ser inabordable, económica o técnicamente.
La I+D+i es el futuro de cualquier país y, concretamente, del nuestro si hablamos de materia hídrica por lo que es necesario que se le apoye
P.- ¿Cómo reaccionas cuando te enteras que habías sido seleccionado como ganador del premio Accésit en la categoría de “Agua y Ciudad” entre más de 25 participantes?
R.- Me encontraba en el trabajo por entonces y rápidamente se lo conté a mi familia. Fue una gran alegría y totalmente inesperado. Aunque pudiera tener cierta esperanza de poder estar entre los trabajos finales, éste es un galardón de ámbito nacional donde se presentan trabajos de gran calidad, por lo que es un reconocimiento muy importante y una recompensa al esfuerzo realizado.
P.- ¿Qué opinas acerca del futuro de la I+D+i en España?
R.- La I+D+i es el futuro de cualquier país y, concretamente, del nuestro si hablamos de materia hídrica. Creo que hay un excelente recurso humano en este país, pero es necesario que se le apoye. Por tanto, debería potenciarse las inversiones públicas y también premios como este, que ayuden a dar difusión a los resultados de la investigación y a los beneficios que trae consigo para la sociedad.